De lo mucho que nos encontramos cada día en la red, otra herramienta (que en sí misma la encuentro tremendamente interesante y con enormes posibilidades en ese reto de la reconstrucción del conocimiento que tanto nos trae de cabeza a los del lado de la educación en esto de la Tecnología Educativa) Xtimeline. Se trata de una herramienta donde se puede construir al estilo «social de la Web» la historia de lo que queramos en forma de línea temporal.
Aunque no renuncio a exponer mi asombro con alguna de vez en cuando, no es mi intención que este blog se convierta en un escaparate de herramientas (para eso ya tenemos muchos que lo hacen y que lo hacen además mucho mejor que yo… a lo mejor en otro post hablamos de ellos).
En este caso mi interés se centra principalmente en una de las líneas de historia que ya ha sido construida en esta herramienta y que está a disposición de todos: la que se refiere a la historia de los contenidos educativos abiertos. ¿y por qué me sorprende?, la verdad es que soy facilmente impresionable ;-), pero además la idea de remontar el comienzo de los contenidos educativos abiertos (OERM) a la década de los 70 me resulta llamativa. NO pongo en duda la veracidad de los datos de la línea histórica que se expone, simplemente me llama la atención sobre nuestra capacidad de desarrollo en unos ámbitos y de retrospección en otros.
Parece que fue ayer… incluso alguno de vosotros vivíais, incluso parece que es algo nuevo… pero, si lo vemos con atención la idea de los recursos abiertos como algo abierto y a disposición de todos sigue siendo algo poco menos que extraño… los contenidos educativos han sido, más que siempre, los que más se han resistido a la idea de compartir… todos nos hemos resistido.
Sólo hasta ahora, en los 3 últimos años (35 años después de que se empezara a hablar de esta idea) entidades de reconocido prestigio internacional abren sus recursos educativos a la comunidad en red (MIT, OU, OUNL, entre otros), y es ahora cuando empiezan a proliferar iniciativas de repositorios en red y de recursos abiertos, la web 2.0 y su filosofía de intercambio y colaboración prolifera…
y es ahora cuando desde los gobiernos se decide pagar a una editorial por los materiales en red para los alumnos de la enseñanza pública y encima a una sola…
¿?… llamativo, al menos.