Sabéis que lo mío NO son los idiomas, pues bien, hoy he hecho una inmersión linguística hablando de TIC aplicadas a la educación. Y lo mejor, he hecho una inmersión SIN dejar de hablar en castellano, pero más aún, he hecho una inmersión en un lenguaje que, los que damos clase en la universidad y especialmente en la facultad de educación, creemos -equívocamente a mi parecer- que no hablamos o no debemos hablar, y que probablemente deberíamos practicar más.
Esperad, a ver si me explico mejor.
Hoy he visto a un maestro –Fernando García Páez para más señas- de un colegio de educación infantil y primaria de un pueblo pequeño de España (Niebla, Huelva) enseñando a otros docentes y futuros docentes (entre los que estaba yo) cómo en su centro TODOS los miembros del mismo -desde el director hasta el conserje, pasando evidentemente por los padres y alumnos- hacen día a día un centro comprometido con la educación de sus niños, y además una educación de esos alumnos para los tiempos que corren.
Hoy de la mano de Fernando nos hemos colado un poco en el CEIP San Walabonso de Niebla.
Del trabajo del Colegio de San Walabonso había oído hablar mucho desde hace unos cuantos años (probablemente desde que hicieron el proyecto que construyó la primera entrada sobre Niebla en la wikipedia) y, como es mi costumbre, había curioseado alguna cosa. Se trata de uno de los primero colegios de primaria que entró en el proyecto de centros TIC de la Junta de Andalucía y ha venido caminando pasito a paso hasta convertirse en una de las caras clásicas para mostrar cuando quieres ejemplificar “buenas prácticas” en la implementación de nuevas Tecnologías en las aulas “de verdad” en educación básica.
Creo que hacer un buceo a fondo por la(s) páginas del colegio de San Walabonso y por las de sus alumnos, profes, y demás, resulta imprescindible, especialmente en esos días de pesimismo en los que no sabemos qué hacer para integrar las TIC en el aula o qé hacer para que los alumnos, o los profes tal o cual… HAY que verlo…
Ahora, no esperéis demasiadas luces de colores, o neones, encontraréis lo que hay, lo que ellos -cada uno en la medida de sus posibilidades y habilidades hacen. Y veréis cómo en lo que todos los profesores no fallan es en su ENORME habilidad para ENSEÑAR y para diseñar actividades para aprender, veréis cómo las TIC ya llegan, las herramientas ya se buscan… y lo de aprender a usarlas… “pues ya aprenderemos”, pero lo primero, antes de la tecnología es saber para qué la usan en el aula… con esa idea ya veremos qué herramienta gratuita encontramos y usamos… y al final lo que aparece en la red -que es mucho y precioso- es sólo “la huella” de lo que hacen, “el rastro”, porque lo importante ya ha pasado en el aula, antes o durante la realización de todo eso que vemos. Y lo mejor, sigue pasando todos los días.
El trabajo conjunto del Colegio y de TODOS sus miembros -en mayor o menor medida- es impresionante, mejor, es ILUSIONANTE.
Eso por un lado. Ahora bien, a la vez que nos colábamos en San Walabonso, me ha encantado oir a nuestro guía en esa visita, Fernando García Páez.
De él tenía una expectativa ENORME creada por su anfitrión (que también es el mío ;-)) y que a decir verdad se ha colmado. Creo que la mejor arma que tiene alguien cuando cuenta algo es, aparte de conocerlo al dedillo y tener más o menos arte hablando, emocionar a la gente que lo escucha. Y la empatía funciona, si tu estás emocionado y te ilusiona algo, tu ilusión y entusiasmo se propaga en los que te oyen. Pues hoy los que oíamos a Fernando éramos sobretodo futuros maestros de primaria, maestros en ejercicio y algunos profesores de la universidad, y a mi me ilusionó. A lo mejor no cuenta 🙂 yo soy una convencida, pero mi impresión es que ilusionó a los que le oíamos allí, a los que le oían les dió un toque de “una escuela mejor es posible” y “vosotros podéis” mientras contaba su centro, es decir: “es posible, porque mirad que nosotros lo hemos hecho”.
Creo que eso es conmover, y creo que Fernando les conmovió (nos conmovió), y hace falta que nos conmuevan. Y a los que damos clase a los maestros nos falta aprender a conmoverles…
De agradecer la pre-conferencia y la post-conferencia que dan mucho de sí 🙂 de la mano de mi anfitrión en el CENT… aqui una fotico post-conference de algunos de los conmovidos :-), más (y esta con nombres) en el flickr
Hola Linda,
ahora el conmovido soy yo 🙂
Y como me has dejado sin palabras, pues sólo puedo agradecerte tu generosidad y tu amabilidad.
Ha sido un placer conocerte.
Un abrazo.
El placer ha sido oirte y hablar contigo… ya ves las caras de algunos 🙂
gracias de nuevo!